“Es precisamente en los momentos de mayor desesperación cuando tienes la oportunidad de encontrar tu verdadero yo.
Así como los sueños cobran vida cuando menos lo esperas, también lo harán las respuestas a aquellas preguntas que no puedes resolver.
Sigue tu instinto como un camino de sabiduría, deja que la esperanza aleje tus miedos”
Fuente: El Delfín Soñador – Sergio Bambaren.
Este pasaje que le leí a mi hija me recordó una pregunta que alguien me había hecho:
Es cierto que los últimos meses no han sido nada fáciles: han sido muy desafiantes. Me enfrenté a una situación familiar difícil que requería mucha responsabilidad y fortaleza. Mi carga de trabajo siguió siendo alta. Y como si eso no fuera suficiente, quería hacer algunos proyectos de voluntariado que estaban muy cerca de mi corazón. Por último, pero no menos importante, el tan esperado inicio de mis nuevos estudios estaba a la vuelta de la esquina…
¿Cómo hice todo esto sin perderme a mí mismo? ¿Cómo mantuve mi energía para seguir adelante?
Me gustaría regalarles mis “5 ingredientes” que me ayudaron a superar este momento difícil. Tal vez puedas usarlo tú mismo si alguna vez te encuentras en una situación similar. O tal vez tengas otros ingredientes que te gustaría compartir conmigo. Siempre me alegran las nuevas sugerencias.
1) Acepta tus sentimientos y dale espacio a ellos y a ti mismo.
He aprendido mucho sobre mí en los últimos años. Un aspecto importante de esto ha sido cómo lidiar con mis sentimientos y pensamientos sin dejar que me abrumen. Ahora acepto mis sentimientos en lugar de reprimirlos o ignorarlos, pero los afronto de manera diferente que antes.
En la difícil fase inicial, me ayudó a hacer una pausa y sentir lo que pasaba dentro de mí. ¿Qué siento? ¿Que pienso? ¿Qué necesito? Me di el tiempo y el espacio para ordenar y procesar mis sentimientos y pensamientos. No intenté actuar o reaccionar de inmediato, sino primero comprender qué necesidad debe abordarse y apreciarse.
Eso me dio un pilar importante en el que apoyarme. Me ayudó a ver más claramente y decidir mejor lo que debo o no debo hacer.
2) Acepta la situación y céntrate en el ahora
Un maestro de sauna en Karlsruhe suele decir que „las personas somos muy sesudas“. Los humanos tendemos a querer controlar y controlar tanto como sea posible. Nos preocupamos por el futuro o luchamos con el pasado. Nos comparamos con los demás o establecemos expectativas poco realistas. Nos hacemos dependientes de circunstancias u opiniones externas.
Todo esto puede robarnos energía. Decidí aceptar la situación tal como es y subirme a la ola. Sólo puedo influir en mi propia actitud.
Al hacerlo, reduje la complejidad de mi vida centrándome en lo esencial. Esto me dio la oportunidad de hacer posible equilibrar la familia, la carrera y otras cuestiones.
3) Sé abierto y transparente al respecto
La respuesta que recibí sobre mi situación fue abrumadora. Solía pensar que debería resolver mis problemas yo mismo. Sin embargo, descubrí que hay muchas otras personas que también tienen dificultades similares y muchas otras que están dispuestas a apoyarme cuando les pido ayuda.
Ser transparente con mis hijos ayudó mucho a afrontar la situación. El poder de la comunidad es algo que me da mucho alimento.
4) Regenérate, ¡esto no es negociable!
Una de mis debilidades es descuidar mis propias necesidades y límites. A veces me pido demasiado a mí mismo.
Esta vez tomé la decisión de programarme horarios fijos que eran “no negociables”. Esto me dio una importante fuente de fortaleza a la cual recurrir. El truco aquí también consistía en ser flexible. Era importante conseguir el tiempo, pero no en un plazo fijo y a cualquier precio.
Pude estar continuamente ahí para todos sin descuidarme.
5) Tenemos libertad de elección
Tomamos más de 20.000 decisiones cada día, consciente o inconscientemente. Algunas son triviales, otras son significativas.
Cada decisión que se me presenta es una oportunidad para dar forma a mi vida. Si bien puede ser abrumador, darme la opción de elegir cómo reacciono ante una situación o qué hago con ella me da la oportunidad de cambiar o mejorar.
Elijo lo que es importante para mí y lo que es bueno para mí en lugar de lo que otros esperan o dictan. Elijo lo que me hace crecer y lo que me llena.
Esto me da una libertad importante que disfrutar. Me ayuda a ser positivo y optimista.
¿Quizás tengas otros ingredientes que te gustaría compartir conmigo? Estoy emocionado de escuchar lo que tienes que decir. No dudes en escribirme un comentario o un mensaje. Espero escuchar de tí.